Adquirir un sofá, es una resolución difícil a la que no le dedicamos el tiempo preciso y por eso que en muchas ocasiones, nuestra resolución no es la más acertada. Aparte de esto, el sofá es el mueble central en la decoración de nuestro salón.
Son muchos los aspectos que debes tener en consideración en el instante de adquirir tus sofás, desde la calidad y el costo hasta el color y el tipo de material con que está hecho, entre otros.
Ahora, te damos unos consejos que debes tener en cuenta para hacer una correcta elección de tu sofá, dependiendo de las particularidades del mismo. Siendo que al no apreciar gastar demasiado en ellos, vas a adquirir unos bonitos sofas de segunda mano, cómodos y agradables.
Función que van a cumplir: El primer punto a tener en consideración es saber la función que va a cumplir y la utilización que vayas a dar a tus sofás. En lo concerniente a la función, no es precisamente lo mismo poner el sofá en un salón que en un dormitorio o en una habitación de juegos. Dependiendo de ello, debemos decantarnos por armazones y tapicerías más o menos resistentes.
Si precisas un sofá al que le vayas a dar mucho empleo y que lo utilicen muchas personas, debes tener en cuenta la dureza de los asientos y del respaldo y la profundidad del asiento, por este motivo te invitamos a que entres en el sitio web de sofas segunda mano de Vacia tu Casa.
Hay que saber, si se empleará para descansar, leer, ver la tele, cenar, si solo va a ser usado ocasionalmente, si solo cumple la función de decorar o incluso, si va a utilizarse como sofa cama auxiliar.
Tamaño y medidas: Es conveniente saber las dimensiones que tiene la habitación donde vayamos a poner el sofá antes de adquirirlo y también el número de personas que lo vayan a emplear. En lo referente a las medidas del sofá, no siempre y en toda circunstancia e instante el número de asientos o cojines coincide con el número de plazas.
Color del sofá: es una elección esencial puesto que el resto de la decoración de la habitación se encarga de esta pieza. Es por tal razón que debe combinar con las paredes y los muebles. Lo más usual es escoger sofás en tonos neutros que combinen a la perfección con el resto de elementos de la estancia y no estar sujeto a tendencias y cambios en la decoración. Cuanto más claro sea el sofá, va a parecer que ocupa menos espacio. Estos tonos claros, sirven para dotar a la estancia de una mayor iluminación, en la medida en que reflejan, en lugar de absorber, la luz, de esta manera sea natural o artificial.
Si optas por un sofá en tonos oscuros ten presente el contraste con las paredes claras, dando de este modo una nota de elegancia y distinción. Los sofás en colores oscuros tienen las ventajas de que disimulan la suciedad y el roce que adquieren con el tiempo.
Los sofás con tapizados en colores lisos, son más simples de combinar con el resto de los muebles de nuestro salón que los estampados, aunque estos pueden resultar muy favorecedores si sabemos como combinarlos además de disimular más el desgaste.