Hay sillas con mucho diseño

La silla, es una pieza de diseño que se adapta con facilidad a cualquier tipo de espacio y que además de estética y funcional, posee un hueco en museos de diseño y de arte contemporáneo  mundiales.

Una silla diseñada en 1950 para el concurso ”Low Cost Furniture Design”, realizado por el MOMA de Nueva York, fue la primera confeccionada en plástico. Conocidísima como uno de los íconos del diseño, se ha convertido en un objeto ansiado por diseñadores y coleccionistas.

Apareció una silla, con la clase del gran diseñador finlandés en 1963, es conocida por sus líneas poco convencionales y se considera como un clásico del diseño industrial. De la misma, se han hecho versiones en las que le han incorporado características curiosas, como música y reproductores de MP3. Fue dada a conocer,  en la feria Internacional del Mueble de Colonia (Alemania), allí dio el pistoletazo inicial para la utilización de fibra de vidrio en la fabricación de muebles.

Hay una silla, diseñada por el holandés Gerrit Rietveld, entre 1932 y 1934, para la que utilizó cuatro elementos unidos, conserva la simplicidad visual que parece tener un complejo proceso de confección. El diseño, de madera de cerezo, no tiene patas y está formada simplemente por superficies planas y un soporte en diagonal que las une. La silla Zigzag, posee con una doble función: como silla o mesa de apoyo; es apilable y no precisa casi de espacio.
Salvador Dalí fue famoso por su obra pictórica, pero también se atrevió con el diseño escultórico; tal es el caso de la silla Leda, que tan sólo fue un boceto y pintada por el artista, pero en los años 90 fué confeccionada por un equipo de diseñadores. Es una silla con tres patas y pequeños pies llevan unos zapatos de tacón. El fino respaldo, está solucionado por unas líneas, trazando con ellas el apoyabrazos, que añade el detalle de una mano delgada en el remate.

 

Fuente: Hay Ottoyanna